Descripción
La pasión entre las energías del corazón. Pendientes en piedra natural y engastados en plata de ley 925 con baño de oro y cierre a presión con dos piezas principales. Por un lado una pieza superior presenta un peridoto y un granate facetados y unidos. Suspendida, una pieza inferior, formada por una turmalina rosa rústica.
Longitud total de la pieza 22 mm
Plata de ley 925 con baño de oro
Cierre a presión
El granate está considerada como piedra de pasión y vitalidad. Ofrece cualidades regeneradoras y purificadoras para tu vida.
Si te sientes deprimido, físicamente (o vibracionalmente), necesitas ayuda con la manifestación, o quieres aumentar tu positividad, el granate es tu piedra. Revitaliza y equilibra tu energía; se dice que limpia la sangre, estimula el metabolismo y alivia la discordia emocional. Además, abre el corazón y genera confianza en uno mismo.
El Peridoto está relacionado con el plexo solar y la zona del ombligo, área regida por las energías amarillo-verde. Posee un color verde tierra que ejerce una inmediata influencia curativa dentro del cuerpo físico. También ayuda en el equilibrio del sistema endocrino, especialmente de las glándulas suprarrenales que rigen la salud del cuerpo físico y están directamente asociadas con los chakras.
Actúa como un tónico para avivar y acelerar el sistema entero, para fortalecerlo, sanearlo y hacerlo más resplandeciente.
El amarillo también es el color que se asocia con la mente y el intelecto. Es capaz de afectar a ciertos estados emocionales negativos como el enfado o los celos. Puede purificar y curar los sentimientos de dolor, egos heridos e incluso ayudar a las parejas desunidas.
Es una piedra ideal para dar a personas que no sepan asociar las realidades más allá del mundo físico. Ayuda al desarrollo físico y al bienestar.
La turmalina rosa es una de las piedras de la tríada del corazón. Puede utilizarse para despertar y estimular el chakra corazón. Su mera presencia infunde alegría y entusiasmo para toda la vida. Anuncia, feliz, que no hay inseguridad alguna en el amor y en la expresión de los sentimientos.
Utilizar, llevar o meditar con turmalina rosa anima al corazón a liberarse de los sufrimientos pasados y a confiar, de nuevo, en el poder del amor.
Muchas enfermedades se originan y se arraigan en el dolor emocional. La turmalina rosa sitúa al corazón en una frecuencia capaz de disipar aquellos resentimientos destructivos. Cuando el corazón queda libre de las impresiones antiguas puede entender entonces la verdadera motivación del sentir: la expresión de la exuberancia y la alegría del amor.